En el fútbol no bastan las buenas intenciones para cosechar títulos, pues a veces se necesitan otros ingredientes para llegar al éxito. Y de eso puede dar fe el presidente del Deportes Tolima, César Camargo Serrano, quien desde que asumió como mandamás del 'Vinotinto y Oro' solo acumula fracasos en materia deportiva, por más de que el balance a nivel administrativo sea ponderable.
Con la inminente eliminación en la Liga BetPlay 1 2023, que se consumaría este miércoles si no logran una serie de resultados, entre ellos el triunfo ante Atlético Nacional, Camargo Serrano protagonizaría otro fiasco: que se sumaría a una lista que empieza a engrosarse, pues hay más certámenes en los que las esperanzas eran altas, pero al final terminaron configurándose en reveses.
El dirigente, quien tomó el mando tras la muerte de su padre, Gabriel Camargo Salamanca, logró con su carisma y una ambiciosa propuesta de mercadeo una cifra récord de abonados: pues 3.834 personas adquirieron su paquete para la fase regular de la Liga, el número más grande desde que se llevan este tipo de iniciativas; y hasta superior a los 1.931 afiliados en el certamen del semestre B del 2022.
Sin embargo, pese a ese respaldo, en la cancha el balance es pobre. A lo que sería esta frustración en la Liga 1 2023, se suma el de la Liga 2 2022; ambos protagonizados, en gran medida, por Hernán Torres Oliveros, quien no logró revertir la mano con la que venía su grupo. Y las tristezas en los cuartos de final de la Copa BetPlay 2022, cuando venía de estar en semifinales en ediciones pasadas.
A esto se suma la humillación sufrida en el juego de vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores 2022, cuando protagonizó la peor derrota de un club colombiano en el torneo: 7-1 ante Flamengo de Brasil, el pasado 6 de julio en el estadio Maracaná. Tal parece que tras el golpe de aquel 26 de junio ante Atlético Nacional, su discurso ya no tiene el mismo impacto que antes en la plantilla.
Y, como si fuera poco, hay que mencionar poco decorosa campaña en la Liga Femenina 2023, con solo dos puntos en 14 compromisos y el 'carrusel' de cuatro entrenadores durante el torneo: Jhon Agudelo, Carlos Castro, Freddy 'Chito' Torres y Gustavo 'La Piña' Mendoza, en lo que sería una fehaciente muestra de la improvisación que caracterizó a este proyecto deportivo en el semestre.
Cierto es que Camargo Serrano, en las últimas dos décadas, fue la mano derecha de su padre y quien estructuró multimillonarias ventas de jugadores del club al exterior. Pero como presidente en propiedad del club, su gestión dista de las expectativas generadas con su verso y sus objetivos, pues por primera vez en los últimos 10 años, el 'Vinotinto' quedará afuera dos veces seguidas de la semifinal.
La única vez que había pasado esto fue, justamente, después de aquella tarde del 7 de julio del 2013, cuando su padre, tras la ofensa recibida tras en la caída (0-1) frente a Águilas Doradas, quiso desentenderse del equipo e, incluso, lo puso a la venta. Y aunque retornó al 'Coloso de la 37' el 2 de febrero del 2014, no tuvo el impulso necesario para evitar ese doble fracaso en la Liga.
Fuertes críticas
Lo que más le han cuestionado algunos hinchas que, sin miedo al repudio constante de un sector de la afición declarado abiertamente oficialista, y que no permite que otros hagan críticas al dirigente so pena de ser estigmatizados como 'enemigos', son sus contrataciones. Jugadores como Héctor Urrego y Juan Camilo Saíz, traídos por Camargo de emergencia, no dieron la talla, por citar unos nombres.
Como tampoco elementos como el zaguero José Cuenú o el atacante Andrés 'Topo' Rentería, a los que podrían unirse otros jugadores contratados por el joven directivo, como el mediocampista Juan Manuel Valencia. Y el voto de confianza en la continuidad de futbolistas como Kevin Pérez, quien ya lleva cinco años en el club y no muestra las condiciones que se esperaban de él para tamaño apoyo.
Es verdad que en la presente Copa Sudamericana ya se embosilló 1.225.000 dólares, por su clasificación a fase de grupos, lo que en medio de estos objetivos inconclusos resulta una especie de bálsamo. Pero en la competencia continental la continuidad también está en veremos, pues marcha tercero de la llave D cuando solo el líder de cada zona clasificará de forma directa a octavos de final.
"Queremos un manejo de camerino distinto. Queremos ver un gran nivel. Tenemos nombres en cada una de las líneas muy buenos. Es así como fuimos exitosos en el pasado y es así como queremos seguir jugando", expresó el directivo cuando le preguntaron por las razones para relevar a Torres y traer al argentino Juan Cruz Real; todo un 'tiro al aire' para un elenco como lo es Tolima.
El primero que deberá asumir responsabilidades en esta nueva debacle será, como es apenas lógico, la cabeza visible de la institución, que ha intentado de manera remota -tal y como lo hacía su progenitor- manejar al club. Pero que en el día a día no consiguió apretar las 'tuercas' y enderezar el camino, pese al abrupto cambio de entrenador, que solo se dio hasta la fecha 15 del campeonato.
Foto: Club Deportes Tolima