Por: Mario Alejandro Rodríguez
Una extraña coincidencia parece atar los triunfos del Deportes Tolima frente a Junior, en el césped del Murillo Toro, a verdaderos 'terremotos' en la interna del 'tiburón'. El botín del 'Vinotinto y Oro' el jueves (1-0), con el que certificó su clasificación a la fase de grupos de la Copa Sudamericana 2023, y por ende la eliminación 'rojiblanca' del torneo, podría hacer que se cumpla una rara 'tradición'.
En la última década solo en tres ocasiones ha ganado la 'tribu' en su predio, el máximo escenario deportivo de los ibaguereños, ante este contrincante. Y en las dos anteriores, estas conquistas provocaron un 'remezón' en el banquillo técnico de su rival, que optó por el camino más fácil cuando hay crisis: la destitución, como queriendo cortar de raíz sus males con la salida de solo uno.
El 16 de marzo de 2014, el elenco del 'Pijao' Carlos César Castro parecía enderezar su rumbo con una goleada a su adversario (3-1), gracias a las celebraciones de Yimmi Chará, en dos oportunidades, y Wilfrido De La Rosa, en su primera tanto como profesional; y pese al descuento del volante Michael Ortega. Y Miguel Ángel 'El Zurdo' López, quien llegaba en la 'cuerda floja', terminó cayéndose.
Las tres derrotas al hilo, la última de ellas ante los de la 'Tierra Firme', sentenciaron el final de la era del argentino, quien nunca más volvió a dirigir; ni al equipo 'currambero' ni a ningún otro. "Junior FC S.A. se permite informar que en el día de hoy se ha tomado la determinación de modificar el cuerpo técnico del equipo profesional de primera división", se leyó por aquella época.
Desde entonces pasaron más de cuatro años para que se volviera a repetir ese doble suceso: celebración del 'Pijao' y crisis en el 'rojiblanco'. Sucedió el 8 de abril del 2018, día en el que el entonces onceno de Alberto Gamero superó (2-1) a los de la 'arenosa', gracias a los goles de Rafael Robayo y un canterano querido por la afición: Sebastián Villa; y aun por encima del descuento de Teófilo Gutiérrez.
Tras este revés, el 'descabezado' fue otro hijo de la casa juniorista: Alexis Mendoza, a quien el 'mecenas' del conjunto costeño lo sacó sin contemplaciones. "No soy más el técnico de Junior, antes de que me hagan preguntas, les digo que Fuad Char me echó", expresó Mendoza, quien llegó con la 'soga al cuello' a la visita a los 'Musicales', a la postre campeones de aquel campeonato liguero.
Y tal parece que la historia está próxima a repetirse, tras el contundente golpe propinado por el técnico Hernán Torres Oliveros y su plantilla, que echó del torneo al gran favorito de la llave y quien tenía en su nómina al jugador de los $1.000 millones por mes: Juan Fernando Quintero. La continuidad del profesor Arturo Reyes pende de un hilo y habrá que esperar si se conocen decisiones.
Aunque en esta ocasión, a los Char los tiene preocupados un problema aún mayor, y no precisamente deportivo. si no judicial: el regreso del país de la exsenadora Aída Merlano, quien prometió 'encender' el ventilador y apuntar hacia el clan que no solo maneja los destinos de Junior, sino de la política en el Atlántico y toda la costa; por lo que el balompié pasó a un segundo plano.
Habrá que ver qué pasará en las próximas horas, que serán decisivas para conocer si el cuadro tolimense pudo finalmente derrocar a otro técnico en su oponente; aunque la premura del juego de este domingo (6:10 p.m.) frente al Envigado Fútbol Club, por la octava jornada de la Liga BetPlay 1 2023 disipará el fuerte impacto recibido. Que, de paso, salvó del colapso a Torres Oliveros.