Peor no podía ser el final de la campaña del Deportes Tolima en la fase de grupos de la Copa Conmebol Sudamericana 2021. Y de eso es consciente Hernán Torres Oliveros, timonel del equipo, al que se le vio un rostro adusto en la rueda de prensa que ofreció tras la derrota (1-2) ante Red Bull Bragantino, en cotejo efectuado en el césped del estadio Pueblo Nuevo de San Cristóbal (Venezuela).
Torres, en su segundo fracaso consecutivo en el evento continental, tras el papelón protagonizado en 2020 cuando tuvo debut y despedida ante Unión La Calera de Chile, trató de dar explicaciones a la afición que, a través de las redes sociales, no ocultó su enojo por lo hecho por el plantel de la 'tribu', que fue inferior al reto internacional y terminó como colero del Grupo G, con solo tres puntos de 18.
"¿Qué lecciones quedan? Muchas. Me parece que Tolima desarrolló buenos juegos, hizo gran trabajo aunque no ganamos. Nos faltó la contundencia, concretar todo lo que producimos. La verdad no pudimos se nos cerró el arco", manifestó Torres Oliveros, al que solo le queda su presencia en la Liga BetPlay 1 2021, en la que está en los cuartos de final, para salvar el semestre.
"Tuvimos opciones por donde ustedes pueden enumerarlas, verlas, definirlas, y no lo pudimos conseguir y para ganar los objetivos hay que conseguir goles y a la postre estamos con la amargura y tristeza de quedar eliminados", manifestó el timonel, quien se escudó en la falta de definición para tratar de justificar su propio fiasco, en un grupo que era a todas luces accesible.
Para el ibaguereño, pese a que no fue capaz de conseguir ni un triunfo en esta instancia de la competición, valoró lo que consideró fue un buen juego de los 'Musicales', que en su concepto mereció más. "En cuanto a clasificación tuvimos una mala participación, pero no en cuanto a juego. No puedo opacar el buen juego que hizo Deportes Tolima", apuntó Torres, en una declaración polémica.
"Aunque el fútbol de hoy es de resultados, es de sumar tres puntos. Y hoy no lo hicimos, de a uno no rinde", remató el orientador de 59 años, quien está al borde del 'abismo' con su divisa, pese a que desde la dirigencia le dieron gusto y pudo contar con casi todos los jugadores que pidió para reforzar su nómina, de cara a los grandes retos que tenía que afrontar en el primer semestre del año.