Tal cual como estaba previsto, el empresario bogotano Fernando Jaramillo Giraldo fue elegido este jueves como nuevo presidente de la División Mayor del Fútbol Colombiano (Dimayor), en reemplazo del antioqueño Jorge Enrique Vélez, quien decidió dar un paso al costado el 24 de Julio a cambio de una muy jugosa indemnización, que sobrepasó los $600 millones.
En la asamblea virtual extraordinaria, Jaramillo -quien al final quedó como candidato único, ante el paso de costado que dieron los demás candidatos, entre ellos César Camargo Serrano, hijo del dueño del Deportes Tolima- se hizo contar y logró 30 de los 36 votos para quedar al mando de la entidad. Cuatro de los elencos se declararon en neutralidad y solo uno sufragó en contra.
La gran mayoría eligió al directivo, ante la pregunta hecha a los representantes de los equipos a través de la plataforma Google Meet. "¿Aprueba la designación de Fernando Jaramillo como presidente de la División Mayor del Fútbol Colombiano?", fue el interrogante hecho, en la que era -de por sí- una elección atípica, por la virtualidad y también por la ausencia de oponentes.
Era una elección cantada, toda vez que cuatro de los equipos grandes del FPC, Millonarios, Santa Fe, América de Cali y Atlético Nacional, al igual que Deportivo Cali, otro de los históricos del rentado local, empezaron a inclinar la balanza hacia Jaramillo, lo que hizo que otros aspirantes renunciaran a sus candidaturas, al no lograr consenso entre los conjuntos.
Pero fue quizá la opinión del presidente de la República, Iván Duque Márquez, la que terminó de 'asegurarle' el cargo al exvicepresidente de Bavaria, e importante directivo en el sector privado. El jefe de Estado hizo un 'guiño' hacia su nombre, en tiempos en los que la relación entre el FPC y el Gobietno era mala, y con ello arrastró a un número importante de divisas, que estaban indecisas.
Su hoja de vida
Jaramillo, el nuevo mandamás del balompié profesional, es abogado de la Universidad de los Andes y cuenta con especialización en Derecho Societario y Tributario en la misma institución educativa. A su vez, en 1999 llevó a cabo una Maestría en Derecho, con énfasis en negocios internacionales en la Universidad de Georgetown, en Washington (Estados Unidos).
En sus inicios profesionales fue parte de la Superintendencia Bancaria, Ministerio de Hacienda e I.B.M Colombia. Igualmente, integró la Oficina de la Presidencia de la República, en el cargo de Asesor Especial para Asuntos de Seguridad. En 1993 y hasta 1995 ejerció como Cónsul general de Colombia en Nueva York, donde también se desempeñó como Asesor Legal Extranjero en Dewey Ballentine.
Durante ocho años, desde septiembre 1996 hasta diciembre del 2004, trabajó en la Organización de Estados Americanos. Mientras estuvo allí, ofició como asesor del Secretario General y Secretario Privado, además, ejerció como Jefe del Gabinete del Secretario General. Cabe resaltar que, para la ejecución en los mencionados cargos, Fernando Jaramillo -de 58 años- domina los idiomas inglés y español.
Desde diciembre de 2004 ha sido Vicepresidente Legal y de Asuntos Corporativos de Bavaria, cargo que desempeñó hasta julio del presente año, y con este gran perfil en la industria privada y pública, llegará a la presidencia de la Dimayor, en el que es -quizá- el peor momento en 72 años de historia como ente rector del fútbol patrio.
En la asamblea virtual extraordinaria, Jaramillo -quien al final quedó como candidato único, ante el paso de costado que dieron los demás candidatos, entre ellos César Camargo Serrano, hijo del dueño del Deportes Tolima- se hizo contar y logró 30 de los 36 votos para quedar al mando de la entidad. Cuatro de los elencos se declararon en neutralidad y solo uno sufragó en contra.
La gran mayoría eligió al directivo, ante la pregunta hecha a los representantes de los equipos a través de la plataforma Google Meet. "¿Aprueba la designación de Fernando Jaramillo como presidente de la División Mayor del Fútbol Colombiano?", fue el interrogante hecho, en la que era -de por sí- una elección atípica, por la virtualidad y también por la ausencia de oponentes.
Era una elección cantada, toda vez que cuatro de los equipos grandes del FPC, Millonarios, Santa Fe, América de Cali y Atlético Nacional, al igual que Deportivo Cali, otro de los históricos del rentado local, empezaron a inclinar la balanza hacia Jaramillo, lo que hizo que otros aspirantes renunciaran a sus candidaturas, al no lograr consenso entre los conjuntos.
Pero fue quizá la opinión del presidente de la República, Iván Duque Márquez, la que terminó de 'asegurarle' el cargo al exvicepresidente de Bavaria, e importante directivo en el sector privado. El jefe de Estado hizo un 'guiño' hacia su nombre, en tiempos en los que la relación entre el FPC y el Gobietno era mala, y con ello arrastró a un número importante de divisas, que estaban indecisas.
Su hoja de vida
Jaramillo, el nuevo mandamás del balompié profesional, es abogado de la Universidad de los Andes y cuenta con especialización en Derecho Societario y Tributario en la misma institución educativa. A su vez, en 1999 llevó a cabo una Maestría en Derecho, con énfasis en negocios internacionales en la Universidad de Georgetown, en Washington (Estados Unidos).
En sus inicios profesionales fue parte de la Superintendencia Bancaria, Ministerio de Hacienda e I.B.M Colombia. Igualmente, integró la Oficina de la Presidencia de la República, en el cargo de Asesor Especial para Asuntos de Seguridad. En 1993 y hasta 1995 ejerció como Cónsul general de Colombia en Nueva York, donde también se desempeñó como Asesor Legal Extranjero en Dewey Ballentine.
Durante ocho años, desde septiembre 1996 hasta diciembre del 2004, trabajó en la Organización de Estados Americanos. Mientras estuvo allí, ofició como asesor del Secretario General y Secretario Privado, además, ejerció como Jefe del Gabinete del Secretario General. Cabe resaltar que, para la ejecución en los mencionados cargos, Fernando Jaramillo -de 58 años- domina los idiomas inglés y español.
Desde diciembre de 2004 ha sido Vicepresidente Legal y de Asuntos Corporativos de Bavaria, cargo que desempeñó hasta julio del presente año, y con este gran perfil en la industria privada y pública, llegará a la presidencia de la Dimayor, en el que es -quizá- el peor momento en 72 años de historia como ente rector del fútbol patrio.