Si bien su salida no fue como quizá la imaginó, luego de haber sido pilar fundamental en la consecusión de la segunda estrella en el primer semestre de 2018, en el corazón del volante de contención bogotano Rafael Fernando Robayo hay un anhelo que, más allás de las diferencias y los malos entendidos, aspira se haga realidad.
En diálogo con 'Liga Deportiva', Robayo -hoy con 36 años y gozando de un semestre 'sabático', tras dejar de pertenecer al Atlético Bucaramanga- habló de su actualidad y dejó conocer ese deseo. Aunque también es sabido que el equipo de los amores del mediocampista es 'Azul' y el anhelo de 'colgar los guayos' también lo ha imaginado con esta casaca.
"Me gustaría retirarme en Millonarios, si hay la posibilidad de retirarme jugando en Millonarios bienvenido. Sino, como segunda opción, como un equipo que quiero mucho hoy en día, Tolima. También lo aceptaría. Serían los dos equipos en los cuales me gustaría retirarme", indicó Robayo, a quien le bastó un año para dejar huella en Ibagué.
En este espacio Robayo confesó que estuvo a punto de irse al NK Rudar Velenje de la Liga de Eslovenia, pero por detalles mínimos, cuando ya estaban definidas las condiciones contractuales, el futbolista no pudo viajar al Viejo Continente.
"Siempre voy a poner eso en manos de Dios, me habían hablado de contrato a dos años y me mandaron documentación para viajar, pero en una semana antes del tema la cuarentena y hubo un inconveniente por tema de patrocinios. Y fue ahí cuando empezó el tema del Coronavirus", dijo el futbolista, quien también tendría opción en España.
El popular 'R8' recordó por qué es tan especial el torneo conquistado con la 'tribu', aquel 9 de junio de 2018 en el césped del Atanasio Girardot de Medellín, cuando de forma agónica el equipo tolimense -bajo la batuta de Alberto Gamero- se impuso ante el más veces campeón del país: Atlético Nacional, en una dramática definición por penales.
"Dios me sacó de un momento del que me tenía que sacar. Me llevó a Tunja, a fortalecerme, y me colocó en Ibagué para premiarme con un título, otra vez. Cuando quizá muchos pensaban que Rafael Robayo iba de salida, incluyendo la gente de allá que cuando llegué tampoco me creía mucho en lo deportivo, pero eso es lo lindo", expresó.
"Me regaló un título, espiritualmente hablando, porque la medalla es un objeto pero espiritualmente me llevó a un título y poder guiar en la palabra a muchos en el Tolima", finalizó el experimentado futbolista, a quien aún los hinchas extrañan en redes sociales, por su compromiso por el club y por el cariño que le profesa.