En medio de la dificultad, de la tragedia de la pandemia del COVID-19 en Colombia, poco a poco aparecen las personas nobles que dan muestra de su buen corazón y han querido aportar su grano de arena para hacerles la vida más fácil a todos aquellos que no han tenido con qué pasarla bien en esta cuarentena. Sobre todo en Ibagué, una ciudad en la que la desigualdad está a la orden del día, con un alto número de personas sin su sustento diario.
Y uno de esos personajes ha sido el joven volante ofensivo del Deportes Tolima, Jaminton Leandro Campaz, quien ha apoyado la iniciativa de la Fundación Paz y Alegría Diversa y se puso 'manos a la obra' para preparar almuerzos y repartirlos para la población vulnerable del centro de la capital tolimense, como lo son las trabajadoras sexuales de la calle 19, cerca al Terminal de Transportes, y los ancianos que viven en la indigencia.
El jugador de 19 años aceptó el domingo anterior la invitación de la fundación, quien a través de su líder, Fredy Giovanny Amaya Cabezas, se preocupa por el bienestar de este grupo en la ciudad y ha llevado a cabo dos jornadas de alimentación en diferentes puntos de la 'Ciudad Musical'. Esto con la ayuda de un grupo de voluntarios, quienes son conscientes de la situación actual. Y la logística de la Policía Nacional, para evitar aglomeraciones.
"Aquí estoy apoyándolos en esta causa que es buena y he venido para colaborar y aquí estamos, gracias", expresó el mediocampista, quien se ha convertido en uno de los jugadores más destacados de la 'tribu' en el último tiempo e, incluso, dicen que suena para ser transferido al fútbol del exterior, gracias a sus destacadas actuaciones en la fase clasificatoria de la Copa Conmebol Libertadores 2020. Y además, alguien que se ha ganado todo a pulso y talento en el fútbol.
Video: El Hormiguero Ibagué.
El almuerzo que repartieron en cuatro puntos de la ciudad consistió en unos fríjoles con pezuña y arroz, plato típico que seguro les llenó el estómago y el alma a las mujeres y demás personas a las que les ha faltado el alimento durante la época de aislamiento social. "Queremos darles las gracias a la Policía Nacional que ha estado siempre con nosotros y la Corporación Surcos Tolima, que también nos está ayudando", dijo Amaya Cabezas, en video que compartió en redes sociales.
Foto: Fundación Paz y Alegría Diversa
El almuerzo que repartieron en cuatro puntos de la ciudad consistió en unos fríjoles con pezuña y arroz, plato típico que seguro les llenó el estómago y el alma a las mujeres y demás personas a las que les ha faltado el alimento durante la época de aislamiento social. "Queremos darles las gracias a la Policía Nacional que ha estado siempre con nosotros y la Corporación Surcos Tolima, que también nos está ayudando", dijo Amaya Cabezas, en video que compartió en redes sociales.
Foto: Fundación Paz y Alegría Diversa