Un bochornoso hecho que se presentó en las obras que se adelantan en el estadio Manuel Murillo Toro de Ibagué, que se adecúa para la participación del Deportes Tolima en la fase de grupos de la Copa Conmebol Libertadores, se volvió rápidamente viral este jueves en las redes sociales.
Un obrero, del cual se desconoce su identidad, se lanzó sin camisa sobre una mezcla de cemento como si fuera una piscina de clavados, haciendo una especie de 'salto mortal'. Conducta que fue grabada, al parecer, por otro obrero y que le ameritó ser licenciado por el Instituto Municipal para el Deporte y la Recreación (Imdri).
Esta acción claramente violó las normas de seguridad industrial que rigen para cualquier intervención arquitectónica y, de paso, puso en entredicho la seriedad de los trabajos que se adelantan en el escenario deportivo de cara al evento continental, cuya primera cita será el 5 de marzo.
"Esto es un hecho aislado que no tiene nada que ver con el instituto", manifestó la gerente Diana Ximena Cepeda, quien ante este suceso convocó en la mañana del jueves a una reunión con los trabajadores, para recalcarles el cumplimiento de sus obligaciones contractuales.
"Esta persona puso en riesgo su vida y protagonizó un riesgo laboral para sus compañeros", agregó la funcionaria, quien fue enfática en decir en que este tipo de actuaciones son inadmisibles para la Administración Municipal.
Recordemos que en el 'Coloso de la 37' se efectúan adecuaciones a zonas comunes de la tribuna Occidental, como palcos, cabinas de prensa, camerinos, zonas de comidas y baterías sanitarias, en una inversión que está por el orden de los $500 millones y que será entregada a mediados de febrero.