Más allá de ser el talentoso refuerzo que llegó al campeón del fútbol colombiano, procedente del Independiente Medellín, la historia de Daniel Cataño dejó a los hinchas del Deportes Tolima boquiabiertos.
El volante antioqueño relevó aspectos desconocidos de su vida personal, entre ellos que estuvo bajo las 'garras' de la droga y el alcohol en su paso por el Atlético Bucaramanga, entre 2015 y 2016.
Lo hizo en una entrevista emitida en la noche del martes en el programa 'Acceso', del canal Win Sports, en el que confesó que durante una época 'metió' metanfetaminas, éxtasis, 'Tusi' y marihuana. Sustancias que pudieron haberle traído una grave sanción de ser detectadas.
También que llegaba a los entrenamientos en las peores condiciones y que quizá ese estilo de vida le alcanzó a pasar cuenta de cobro con algunas lesiones de las que le costó recuperarse.
"Me drogaba después de los partidos para estar limpio si me hacían prueba de doping, incluso pagaba exámenes antes de los juegos para saber si todavía había rastros, eso me daba mucho temor", indicó el bellanita en uno de los apartes.
"Me gustaba mucho el licor y llegaba a los entrenamientos enguayabado. Pero sabía que tenía que correr y rendir en la cancha. Aunque siento que ese estilo de vida me afectó y el cuerpo me cobró", agregó el jugador, quien en sus inicios se vio afectado por una pubalgia.
Cataño vivió momentos fuertes de depresión. "Uno se siente solo a pesar de estar rodeado de mucha gente. Llegaba de los entrenamientos y me ponía a llorar sin ninguna razón", expresó.
Sin embargo, el mediocampista confesó que la fe por Dios y la lectura de la Biblia lo sacó de los malos pasos y le permitió recuperarse. Hasta llegar a convertirse en uno de los mediocampistas más talentosos del rentado criollo.
"En Bucaramanga, después del ascenso, cambié de vida y estoy muy agradecido con eso. Dios le dio un giro total y empecé a caminar diferente", refirió el jugador de 26 años.
En la actualidad, Cataño disfruta de las 'mieles' del amor y espera pronto debutar con los 'Musicales'. Hecho que no ha podido darse debido a una lesión abdominal de la que fue intervenido quirúrgicamente.