Se volvió una práctica común en los últimos ocho años en el Club Deportes Tolima: Que sus arqueros salgan por la puerta de atrás, luego de haber dejado huella gracias a sus actuaciones en el campo de juego.
El turno esta vez para el paraguayo Joel Alberto Silva Estigarribia, quien después de tres años y cinco meses terminó su ciclo, al parecer por orden del presidente y dueño de la institución, Gabriel Camargo Salamanca..
Con solo nueve partidos de 25 jugados en la Liga Águila 1 2018, Joel vio cómo desde la directiva habrían impuesto en su lugar al guajiro Álvaro Montero, que como buen profesional se limitó a cumplir con sus obligaciones, sin que fuera culpable de la situación.
Silva se sumó a la lista en la que aparecen, por desgracia, el nariñense Bréiner 'Brecas' Castillo, su compatriota Ántony Silva y el uruguayo Leonardo Burián, quien al igual que Joel salió campeón con el equipo. Sin hacer mayor énfasis en que también se fueron Luis Estacio y Jáner Serpa.
Una historia que se repite
Foto: Suministrada.
Una historia que se repite
Foto: Suministrada.
El 3 de junio 2010, y luego de ser figura en la campaña en la que el equipo -dirigido por Hernán Torres Oliveros- llegó hasta la semifinal de la Liga 1, en la serie ante La Equidad, 'Brecas' dio por terminada su estadía en Ibagué tras tres temporadas.
El de Barbacoas, quien le había pedido a Camargo tiempo para mirar otras posibilidades, se habría enterado por los medios de comunicación que el club le buscó reemplazo sin avisarle: Precisamente el 'guaraní Ántony Domingo Silva, quien luego también partió en medio de polémica.
En efecto, fue en febrero de 2014 cuando Ántony, quien fue subcampeón de la Liga 2 2010 y llegó hasta los cuartos de final de la Copa Sudamericana, decidió buscar su salida de elenco tolimense. Esto por diferencias en las condiciones de su vínculo contractual, sobre todo en un documento impuesto por la Dimayor, que iría en contra de la normativa laboral colombiana.
"Por más que sea un requisito para jugar, no tiene que ser una obligación renunciar a los derechos. Y sí firmar el documento es una exigencia, no lo voy a hacer", indicó Silva en ese entonces, antes de confirmar su desvinculación.
Solo unos meses después, el 13 de diciembre de 2014 -en la antesala de la celebración de los 60 años del club y tras la derrota (1-2) ante Águilas- Camargo liquidó en el camerino Sur del Murillo Toro al 'charrúa' Burián, quien un mes antes fue clave para la consecución del título de la Copa Colombia; en aquella final ante Santa Fe.
Fue tal la molestia del golero que no se apareció esa noche por el Club Campestre de Ibagué, en donde se llevó a cabo la velada. Su estadía en la ciudad apenas alcanzó los seis meses, pese a que tenía contrato por un semestre más.
"Creo que me porté muy bien como para que me traten así, ¡Es una lastima! Pero la verdad ahora lo voy a pensar. Igual estoy agradecido a los que siempre me apoyaron, alentaron, y dichoso de haber conseguido un titulo para este club", indicó en sus redes sociales.
Y el último caso lo vivió Joel, a quien prácticamente lo 'borraron' de la nómina ante su deseo de no renovar su vínculo laboral, el cual se extendía hasta el próximo 31 de diciembre.
En el caso del 'guaraní', desde la directiva aprovecharon la lesión sufrida en la espalda el 13 de marzo para mandarlo al banco, como si fuera una estrategia para aburrirlo: Nada nuevo en un equipo que no ha sabido tratar a sus referentes.
"Yo salí por lesión, no por mi rendimiento. Luego no me pusieron más. Todo el mundo lo sabe, que mi inactividad con el equipo es porque en diciembre se acaba mi contrato con Tolima", le dijo Silva a El Rincón el pasado 24 de mayo.
"Por más que sea un requisito para jugar, no tiene que ser una obligación renunciar a los derechos. Y sí firmar el documento es una exigencia, no lo voy a hacer", indicó Silva en ese entonces, antes de confirmar su desvinculación.
Solo unos meses después, el 13 de diciembre de 2014 -en la antesala de la celebración de los 60 años del club y tras la derrota (1-2) ante Águilas- Camargo liquidó en el camerino Sur del Murillo Toro al 'charrúa' Burián, quien un mes antes fue clave para la consecución del título de la Copa Colombia; en aquella final ante Santa Fe.
Fue tal la molestia del golero que no se apareció esa noche por el Club Campestre de Ibagué, en donde se llevó a cabo la velada. Su estadía en la ciudad apenas alcanzó los seis meses, pese a que tenía contrato por un semestre más.
"Creo que me porté muy bien como para que me traten así, ¡Es una lastima! Pero la verdad ahora lo voy a pensar. Igual estoy agradecido a los que siempre me apoyaron, alentaron, y dichoso de haber conseguido un titulo para este club", indicó en sus redes sociales.
Y el último caso lo vivió Joel, a quien prácticamente lo 'borraron' de la nómina ante su deseo de no renovar su vínculo laboral, el cual se extendía hasta el próximo 31 de diciembre.
En el caso del 'guaraní', desde la directiva aprovecharon la lesión sufrida en la espalda el 13 de marzo para mandarlo al banco, como si fuera una estrategia para aburrirlo: Nada nuevo en un equipo que no ha sabido tratar a sus referentes.
"Yo salí por lesión, no por mi rendimiento. Luego no me pusieron más. Todo el mundo lo sabe, que mi inactividad con el equipo es porque en diciembre se acaba mi contrato con Tolima", le dijo Silva a El Rincón el pasado 24 de mayo.