Se conoció este jueves por parte de la gerente del Instituto Muncipal para el Deporte y la Recreación de Ibagué (Imdri), Diana Ximena Cepeda, la primera intervención que se le hará al estadio Manuel Murillo Toro con miras a la participación del Deportes Tolima en la Copa Libertadores 2019.
De acuerdo con la funcionaria, se está en proceso de hacer el cambio de la red hidrosanitaria de la tribuna de Oriental y de parte de Norte y Sur, que le costaría al Municipio cerca de $450 millones, más $35 o $40 millones de la interventoría de obra.
"Si bien entendemos que hay grandes necesidades, en este caso la prioritaria es hacer lo que se necesita con respecto a las unidades sanitarias de algunas de las tribunas, teniendo en cuenta que se encuentran en mal estado", expresó Cepeda.
La última remodelación que se le hizo a este sistema data del 2015, cuando en la administración anterior -con miras a los Juegos Nacionales- se llevó a cabo el cambio de la red en la localidad de Occidental y la mitad de Norte y Sur.
Por el momento se están haciendo los estudios previos, como también la consecución de recursos con miras a esta importante obra, de cara a lo que será el regreso del 'Vinotinto y Oro' al certamen continental de clubes tras seis años.
Se espera que en las próximas semanas esté colgado en la plataforma del Secop el pliego licitatorio de la obra, la cual tendría una duración estimada de dos meses. Cepeda garantizó que en todo caso no se cerrarán tribunas del escenario deportivo.
"Miraremos cómo se hace un aislamiento y se ponen baños provisionales para que no se cierre el estadio", precisó la gerente, tras su intervención este en el Concejo de Ibagué en donde su labor fue objeto de control político.
"Desde que quedó campeón Tolima nos hemos estado reuniendo con su dirigencia para trabajar de la mano en esta y otras cosas que queremos adelantar", agregó la funcionaria.
Cabe destacar que otra de las intervenciones que se tienen pendientes tiene que ver, primordialmente, con el sistema de iluminación, la cual se ha dilatado desde mayo de 2017 y se hace necesaria ante las reiteradas fallas en las luminarias y el cableado.