Una vez más, como ya suele ser costumbre en los últimos cuatro años, el técnico Alberto Miguel Gamero volvió a clasificarse con Deportes Tolima a la semifinal de la Liga Águila 1 2018.
El equipo del 'Sonero' fue el único de los 20 que participaron en el certamen que logró repetir lo hecho en la Liga 2 2017, frente a escuadras con chequeras más poderosas y que sucumbieron en su intento. Como Millonarios, el vigente campeón, que ni siquiera estuvo entre los ocho mejores.
De hecho, esta es la sexta ocasión en que disputará esta instancia, de siete torneos en los que ha tenido la oportunidad de dirigir al conjunto 'Vinotinto y Oro'. El único en el que no logró clasificar fue el del primer semestre de 2016.
Y eso tiene muy satisfecho al estratega, quien en rueda de prensa agradeció a sus pupilos por el esfuerzo hecho en el triunfo (3-0) ante Once Caldas. Pero sobre todo, a los hinchas que convirtieron el Manuel Murillo Toro en una 'caldera'.
"Felicito a toda la gente en Ibagué, a todos los hinchas que hoy (Domingo) fueron el jugador número 12. Sentí esa presión y necesidad de pasar. Esa gente vino, nos acompañó y nos apoyó y a Dios gracias le retribuimos lo que ellos quisieron", expresó el samario.
"El equipo hizo muy buen trabajo y estoy orgulloso. Veo que estos muchachos quieren aprender cosas todos los días. Y mis más sinceras felicitaciones porque lo que hicieron fue grande", agregó el timonel, quien llegó a 204 partidos al frente de los 'Musicales'.
El desarrollo
Un estilo de juego vertiginoso, pero a la vez efectivo, le permitió al entrenador y su grupo pasar por encima de un adversario que solo tuvo breves chispazos en los primeros 15 minutos y luego naufragó en su impotencia.
Fue una victoria bien trabajada, en la que, por fortuna, se rompió el maleficio de 354 minutos sin convertir en la competición y se tuvo la solvencia para seguir de largo.
"Enfrentamos a un digno rival, que también hizo las cosas bien. Encontramos un gol en el primer tiempo después de tanto buscarlo. Era normal que ellos en una contra nos podían generar riesgo, como lo hicieron, pero a eso estábamos expuestos", destacó Gamero.
"Y creo que en el segundo tiempo tuvimos la tranquilidad. Se veía el equipo rápido pero no desesperado, con transición rápida. Creo que ganamos bien, porque pese al marcador adverso el grupo no se descompuso", señaló el adiestrador.
A diferencia del compromiso de ida, en esta ocasión gran parte de las opciones que generó su plantel terminaron en el fondo de las piolas. Y es que en el césped del Palogrande de Manizales hubo una feria del desperdicio en cierto modo preocupante.
"Les mostré el video del partido de ida para que supieran qué es lo que están haciendo. En el partido que hicimos allá tuvimos cuatro opciones de gol. Hoy (Domingo) de pronto tuvimos menos, pero fuimos más efectivos", recalcó.
Fundamental
Gamero también se refirió al gran momento que pasa el mediapunta antioqueño Sebastián Villa, quien participó en dos de los tres goles y gracias a sus actuaciones está a punto de irse para el balompié del exterior.
"Encontramos en Villa casi un partido perfecto. Lo único malo fue que se dejó sacar una amarilla. Hablé con él de que se hace historia llegando al título, siendo campeón. Los jugadores pasan y las instituciones quedan", refirió el entrenador.
Al canterano le encomendó una misión especial, que ocasionó que la visita no tuviera flujo ofensivo y se viera enfrascada en su propio terreno.
"Defendimos bien las bandas. Villa hizo un buen desgaste, en un ida y vuelta con los laterales de ellos, Hinestroza y Gómez. Pero en términos generales el equipo cerró pasillos centrales y bandas. Y controlamos bien", indicó.
Por último, Gamero destacó los tantos convertidos por el cartagenero Ómar Albornoz y el venezolano Yohandry Orozco: Dos jugadores que estaban aun en deuda en este aspecto, pero que tras la goleada ante los 'Cafeteros' parecen haberse quitado un 'piano' de la espalda.
"En la charla les dije dos cosas que afortunadamente salieron: Necesitamos que Albornoz nos ayude a hacer goles, porque no es solo un extremo. Y necesito que el señor Orozco me ayude a que el equipo suba en ese sentido. Y lo hicieron, aumentamos la producción", puntualizó.
Ante Independiente Medellín, primero en Ibagué y luego en la capital antioqueña, el profe buscará su segunda clasificación a una gran final, tras la jugada en la Liga Águila 2 2016. Y así seguir alimentando la ilusión de la segunda estrella, tras casi 15 años de sinsabores.