En su acostumbrado tono, beligerante y poco conciliador, el presidente del Deportes Tolima, Gabriel Camargo Salamanca, le salió al paso a las declaraciones del alcalde de Ibagué, Guillermo Alfonso Jaramillo, quien hizo público su deseo -la semana anterior- de incrementar el valor por el alquiler del estadio Manuel Murillo Toro.
El dirigente deportivo dejó en claro que no permitirá que el burgomaestre le cambie las 'condiciones del juego' y que antes de que eso suceda preferirá llevarse el equipo a otra ciudad, en donde -según él- sí valoren tener fútbol profesional.
"No estoy desafiando al señor alcalde. Pero la verdad prefiero primero -y lo digo seriamente- irme a otra plaza antes de permitir que nos suba las tarifas, pero no voy a ser el tonto.
"Él quiere que le corramos con todos los gastos del estadio por utilizarlo dos o tres veces al mes, para jugar 90 minutos y eso no es así, porque nosotros no hacemos uso exclusivo del escenario, ni somos los dueños", expresó Camargo Salamanca en el Combo Deportivo de Caracol Ibagué.
Y agregó: "Esto me está molestando, no sé qué más hacer, porque nunca hemos repartido un peso de utilidades.
"Hemos tenido años buenos, eso es cierto, pero en este año no hemos vendido jugadores y calculo que las pérdidas serán de 10.000 millones de pesos este año. Solo en junio es de $1.017 millones y tenemos acumulados $2.717 millones".
"Él quiere que le corramos con todos los gastos del estadio por utilizarlo dos o tres veces al mes, para jugar 90 minutos y eso no es así, porque nosotros no hacemos uso exclusivo del escenario, ni somos los dueños", expresó Camargo Salamanca en el Combo Deportivo de Caracol Ibagué.
Y agregó: "Esto me está molestando, no sé qué más hacer, porque nunca hemos repartido un peso de utilidades.
"Hemos tenido años buenos, eso es cierto, pero en este año no hemos vendido jugadores y calculo que las pérdidas serán de 10.000 millones de pesos este año. Solo en junio es de $1.017 millones y tenemos acumulados $2.717 millones".
El exsenador, quien del año 2008 al 2015 gozó del beneplácito de las administraciones de Jesús María Botero y Luis H. Rodríguez, quienes le permitían usar el escenario sin pagar rubro alguno, también salió a hablar del polémico tema en su medio de comunicación favorito, Los Dueños del Balón de RCN.
Allí, a micrófono abierto, dijo que Jaramillo le estaría cobrando el haber apoyado en las elecciones municipales de 2015 a Ricardo Ferro Lozano, por lo que se siente perseguido por el burgomaestre en este tipo de reclamos.
"Para nadie es un secreto que yo no apoyé al señor alcalde en su candidatura para la Alcaldía y esto me huele a venganza.
Él debe informarse mejor del acuerdo pactado entre nosotros. En lugar de ayudarme me quiere aumentar los impuestos y la verdad que un equipo como el Deportes Tolima que pague más de los que está pagando, con esas taquillas tan malas, no se justifica", agregó.
Él debe informarse mejor del acuerdo pactado entre nosotros. En lugar de ayudarme me quiere aumentar los impuestos y la verdad que un equipo como el Deportes Tolima que pague más de los que está pagando, con esas taquillas tan malas, no se justifica", agregó.
La polémica
El exsenador añadió que, contrario a lo que señaló el alcalde Jaramillo, la institución sí está cumpliendo con lo pactado en el Acuerdo 019 de 2016, que reglamenta las condiciones mínimas para el alquiler del escenario deportivo; en especial el ingreso gratuito de menores a la Lateral Norte.
"Estamos cumpliendo con lo de los niños. En la tribuna familiar entraron más de 3.000 niños gratis este domingo, porque solo pudimos vender 3.000 boletas. Estamos cumpliendo el acuerdo a cabalidad", acotó.
Aunque luego expresó que no estaban en la obligación de dejar ingresar los menores gratis, debido a que no están haciendo uso del gramado del Murillo Toro para los entrenamientos del equipo y ello no era condición contractual.
"El Señor Alcalde ya me ha amenazado varias veces que si no dejo entrar a los niños no me presta el estadio y yo no sé, ya me tiene canso eso. Estoy que tiro la toalla vamos a ver qué pasa, me parece la injusticia más grande", agregó Camargo.
"El Señor Alcalde ya me ha amenazado varias veces que si no dejo entrar a los niños no me presta el estadio y yo no sé, ya me tiene canso eso. Estoy que tiro la toalla vamos a ver qué pasa, me parece la injusticia más grande", agregó Camargo.
Este es un argumento erróneo, porque según conoció esta redacción el no hacer sus sesiones en el escenario no lo exime de cumplir con lo estipulado en el Acuerdo, como al parecer lo hizo en los juegos ante América y Nacional, por la Liga 1 2017.
El mismo que, entre otras cosas, le bajó de forma ostensible los valores por el alquiler del escenario, de 22 y 33 salarios mínimos mensuales a solo 2, más el 6% de la recaudación por juego.
Según Camargo, en el acuerdo se habló de la posibilidad del club de instalar publicidad en el estadio; contrario a la información que dio a conocer el martes el Imdri, que puso a la venta dichos espacios a costos superiores al millón de pesos mensual, alegando que es el Municipio el que tiene la potestad de rentarlos.
Por último, Camargo Salamanca le mandó un 'recado' a Jaramillo, diciéndole que él sí era una persona honesta, que no recibía "ni un solo cheque a nombre del Deportes Tolima".
"Voy a enviar los balances financiero a corte de junio, al alcalde, al Concejo y la prensa, porque el señor alcalde cree que somos unos ladrones y no es así. Somos personas honestas. Él falta a la verdad al decir que yo no reporto las taquillas", finalizó.