Aunque su divisa logró este lunes ante Cortuluá (2-0) tres puntos vitales
para salir del 'atolladero' de la parte baja de la tabla, el interés en conocer
las reacciones del técnico del Deportes Tolima, José Eugenio 'Cheché'
Hernández, pasó más por los rumores que se 'tejieron' en la previa, sobre su
posible salida por presuntas diferencias con el dueño del club, Gabriel
Camargo.
Y en forma diplomática el estratega se encargó de desvirtuar
tales informaciones, como también a quienes indicaban, con certeza, que ya le
tenían reemplazo por si sufría un revés frente al equipo 'Corazón' del Valle:
El samario Alberto Miguel Gamero, quien estuvo en Ibagué entre 2014 y 2016.
"La relación del senador conmigo es buena. Hablé el
domingo con él, el sábado y hoy (lunes). Y todo muy bien. Me preguntó cómo
estaban los muchachos, cómo me sentía. Y este triunfo es para él que creyó en
mi propuesta", refirió el orientador en el Combo Deportivo de Caracol.
"Nunca en mi vida he tenido inconvenientes con los
dueños de los clubes en los que he estado. Respeto a mis colegas profesionales
que quieran estar acá. Dije hace algunos días que me sentía bien y que iba a
luchar por quedarme acá.
"Pero si me toca irme, si mi paso fue hasta hoy
(lunes), al menos me quedaré en un hotel, porque me ha gustado mucho la ciudad.
Me he sentido cómodo acá, la gente ha sido muy amable, la prensa ha sido
especial y estoy muy agradecido", añadió.
Pero luego, en rueda de prensa, dijo estar sorprendido por
ese interrogante inicial y quiso profundizar su concepto, pues para él esto es
fútbol y cualquier cosa puede pasar con respecto a su situación contractual.
Eso sí, tiró un mensaje que puede prestarse para múltiples interpretaciones.
"No son 200.000 o 500.000 equipos y hay mucho técnico.
Y cada uno quiere estar trabajando, es complicado estar por fuera. Entonces
lógicamente cuando alguien está tambaleando viene la llamada y no pasa nada, es
fútbol.
"Simplemente tiene que haber un respeto también, unos
códigos y valores, pero cada uno verá cómo educa sus hijos, con qué ética, para
competir en un mercado laboral y no incomodar a alguien que está trabajando
honestamente (...) Mis respetos para la persona que nombraron ustedes (Gamero) y
para otros", refirió Hernández.
El partido
En lo concerniente al desarrollo del compromiso y las claves
para llegar al triunfo, 'Cheché' destacó la capacidad que tuvo su escuadra para
amoldarse nuevamente al esquema 4-1-4-1. Esta vez con modificaciones nominales
importantes, como la pareja Cardoza - Mosquera en defensa, la presencia de
Rivas como cabeza de área, Lloreda como extremo y Pérez como delantero neto.
"Pienso que nuestro triunfo se basó en dos aspectos
fundamentales: Uno en la labor del cuerpo técnico en analizar en detalle las
circunstancias lo que venía sucediendo y luego la interpretación que le dieron
los jugadores a la idea que se quería plasmar.
"Les dije a los muchachos: Si yo
veo esa alineación, el equipo que va a salir a jugar, compro la boleta, a ver
qué resulta", precisó el entrenador.
Y agregó: "Era un riesgo, Había que jugar de esa
manera, no había otra. Los jugadores entendieron, con el trabajo la repetición
de las cosas y el convencimiento. El triunfo no nos da ni un campeonato ni
nada, solo tres puntos que querían conseguir los muchachos.
"Tenía mis temores a saber cómo se iban a agrupar y
ayudar a Avimiled (Rivas) en el medio para no dejarlo solo. Pienso que hicieron
un buen trabajo gracias a Dios y a los jugadores que entendieron la idea.
También se refirió al aporte que hicieron otros jugadores
que venían por fuera del primer equipo. Caso específico el de Rafael Carrascal,
quien pese a su buen arranque fue excluido de la nómina inicialista.
"(César) Quintero venía de una lesión y (Rafael)
Carrascal entró tras sufrir un 'castigo' para que su producción fuera mejor, lo
tomó bien. Esto es un 'proceso', aunque no los hay en el fútbol, una guía para
plasmar un equipo que puede jugar bien", explicó el adiestrador.
Reconoció sus faltas
Por último, el técnico Hernández fue autocrítico con su
gestión, la cual dijo no comenzó con los resultados deseados porque le ha
costado -y mucho- comprender el entorno en el que tiene cabida Deportes Tolima,
que es muy diferente al que se percibe en otros clubes del rentado criollo.
"Algunas situaciones, entender algunas cosas, como la idiosincrasia
de algunos jugadores, el saber cómo se desempeñan en la cancha y verlos
competir. Pero hoy (Lunes) hubo una expresión diferente y toda la gente lo pudo
ver.
"Todo esto no se da de la noche a la mañana. Uno tiene
que ir palpando, tomé ese riesgo de asumir algo que necesitaba hacer por el
bien del equipo y se consiguieron tres puntos valiosos", finalizó.