En caliente, el técnico del Deportes Tolima, Óscar Héctor Quintabani, habló de lo que le dejó la presentación de su escuadra como visitante ante Bolívar de Bolivia, que derivó en la eliminación de la Copa Conmebol Sudamericana 2017.
El argentino quiso destacar la actitud que, según él, tuvieron los jugadores para soportar un primer tiempo difícil y buscar en el segundo darle vuelta a la adversidad, hecho que al final no se dio.
"De mi equipo rescato la dignidad que hubo para jugar y el remate de partido que hizo, con todo el desgaste, frente al buen equipo que tenía al frente y el tema de la altura. Salió a buscar el resultado y eso es lo que más a uno lo satisface por la entrega que tuvieron", enfatizó el entrenador.
Sobre el planteamiento del juego, en el que jugó con tres volantes de recuperación (César Quintero, Luis Paz y Avimiled Rivas), la idea era ocupar el ancho del campo y tratar de neutralizar la intención del dueño de casa, fuerte en las bandas.
"Sabía que Bolívar iba a plantear el partido de esa manera, apostándole al 2 contra 1, con doble ataque de bandas y buenos cabeceadores. Tratamos de igualarlos, contrarrestar los centros y estábamos bastante preparados en ese sentido", indicó.
Y agregó: "Queríamos con el 4-3 manejar los espacios y justamente tratar de utilizar las espaldas de (Edemir) Rodríguez y (Enrique) Flores. En las dos veces que lo logramos, en una a Ángelo (Rodríguez le hacen falta y en otra (Santiago) Montoya no llegó a tiempo".
En ese orden de ideas lamentó la falta de definición que tuvo su escuadra en las escasas aproximaciones de gol al campo del golero Matías Dituro, quien no tuvo mayor labor.
"Si hubiésemos podido definir algunas de esas opciones de contra que tuvimos al principio quizá el partido hubiera cambiado ostensiblemente", refirió.
Sí fue penal
En su concepto, al menos a priori, sí hubo penal del volante Avimiled Rivas sobre el atacante Eduardo Fierro, que derivó en el único gol del partido y por ende en la eliminación del 'Pijao' de la 'Otra mitad de la gloria'.
"Lástima que sobre el final vino la jugada del penal, muy infantil. Y eso le da la tranquilidad y el resultado al rival. En el segundo tiempo buscamos otros recursos, con otros hombres frescos, que era lo que teníamos en mente", expresó Quintabani.
"Fue un penal en el que el jugador (Rivas) se desespera, en una última jugada que tenía cierto control", añadió el 'gaucho', contrario al sentir de los hinchas, quienes por redes sociales criticaron la actuación del árbitro Sandro Ricci.
Pese al duro revés sufrido en La Paz, Quintabani felicitó al rival por su logro, al cual era una obligación para él de cara a lo que podría ser su futuro en la 'tribu'; el cual está en veremos.
"De todas maneras vendimos cara la derrota, jugamos hasta el fin y cualquiera de los dos equipos que hubiera pasado en la serie creo que era digno de serlo", puntualizó el adiestrador.
Así Quintabani finalizó un semestre para el olvido, pues de las tres competencias en la que tenía vida (Liga Águila, Copa Águila y Sudamericana) en todas quedó eliminado de forma prematura.
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