Por: Mario Alejandro Rodríguez
Después de cuatro años, de momentos inolvidables, pero otros también muy dolorosos, el joven delantero Wilfrido De La Rosa Mendoza dijo 'Hasta pronto' y se marchó.
Con 23 años, De La Rosa fue cedido a préstamo por un año al Unión Magdalena, club en el que espera demostrar todo ese fútbol que en Ibagué no pudo, por x o y razón.
Antes de irse, el hijo de Algarrobo habló con El Rincón del Vinotinto sobre lo que significó para él su salida del cuadro 'Pijao', con el que debutó en Primera, salió campeón del Torneo Juvenil de 2013 y de la Copa Colombia 2014.
"Tengo sentimientos encontrados, porque sé que en la B, con el equipo de mi tierra tendré muchos más minutos para demostrar mis capacidades y hacer goles, que es lo que me gusta. Pero también quería quedarme, porque gracias al Tolima pude hacer realidad mi sueño de ser un jugador profesional", dijo el ariete.
Y agregó: "Logré dos títulos mientras estuve aquí. Pero me faltó el más importante, el que soñaba: la Liga, por eso quedé con una espinita que quiero sacarme cuando vuelva".
Wilfrido confirmó que esta decisión la tomó el presidente del club, Gabriel Camargo, sin consultarle al nuevo técnico, el uruguayo Gregorio Pérez. Pese a que guardaba la esperanza de quedarse, sabía que la posibilidad de tener ritmo era casi nula; tras la llegada del hondureño Eddie Hernández y la continuidad de Ángelo Rodríguez.
"La verdad la decisión fue del Senador (Camargo). Antes de que llegara el técnico nuevo el deseo de él era cederme para que jugara más, por lo que le dijo al profe Gregorio que no fuera a contar conmigo en la pretemporada. Hablé con él (Pérez) y me deseó lo mejor en este nuevo paso en mi carrera", expresó De La Rosa, goleador de la 'tribu' en los dos títulos que conquistó.
Tiene claro, eso sí, que en 2018 quiere quedarse en la escuadra 'musical'. El 2017 será para él el año de la reivindicación con el fútbol, tras haber sido víctima de una prolongada lesión de meniscos que lo tuvo por más de ocho meses fuera de competencia en el último año y medio.
"Mi deseo la verdad es volver, porque yo me siento como un tolimense más, una insignia de la institución. Incluso mi hijo, Tilson, es ibaguereño. Solo espero hacer las cosas bien y que eso me sirva para regresar al Tolima y ser titular, que es lo que tanto quería", puntualizó.
Por último, le envió un mensaje a la parcial tolimense: "A la afición quiero agradecerle por todo su apoyo, en las buenas y en las malas. Los llevaré en el corazón, aunque espero volver a hacer historia", expresó.
De la Rosa se convirtió en la séptima salida confirmada del onceno musical, tras las desvinculaciones de los panameños Abdiel Arroyo y Gabriel Gómez; el paraguayo Víctor Aquino; el huilense Christian Alarcón, el tumaqueño Henry Obando y el paisa John Valencia. A ellos se uniría el volante vallecaucano Déinner Quiñónez.
El dato
Solo 43 minutos jugó De La Rosa en el 2016, todos ellos en el segundo semestre del año.
Sabía usted qué
En el Unión Magdalena De La Rosa compartirá camerino con el volante ibaguereño Nicolás Rubio, quien dejó Envigado F.C. para reforzar a la divisa samaria en el Torneo Águila.