Un acto vergonzoso, reprochable desde todo punto de vista, vivió el equipo de El Rincón del Vinotinto este domingo, cuando intentó ingresar a la tribuna sur del estadio Manuel Murillo Toro para el partido que ganó Deportes Tolima (3-1) ante Millonarios, por la fecha 7 de la Liga Águila 2 2016.
Pese a que este medio de comunicación no fue acreditado por la División Mayor del Fútbol Colombiano, ni recibió la colaboración de la dirigencia del cuadro 'Pijao' para hacer su labor, estuvo dispuesto a cubrir desde la lateral sur las incidencias del encuentro. No obstante, el maltrato de efectivos de la Policía Nacional impidió que se llevara a cabalidad el trabajo planeado.
En el momento en que el periodista Mario Alejandro Rodríguez quiso ingresar a esta localidad con boleta en mano, su cámara fotográfica y una mochila en la que se encontraba este artilugio, se le impidió la entrada debido a que -según la Fuerza Pública- estos elementos estaban prohibidos; y, en el caso de la cámara, esta era considerada un elemento de agresión contundente.
Aunque el comunicador intentó convencer a los encargados de la logística de su equivocación, más aún cuando en el más reciente cotejo no registró inconvenientes de este tipo y pudo hacer su trabajo con normalidad, la respuesta no fue la esperada.
A las negativas de los oficiales, a quienes le faltó el sentido común, vino luego la agresión física, con empujones, golpes y malas palabras; hechos que quedaron grabados. ¿La excusa? "Estamos cumpliendo con nuestro deber", atinó uno de los oficiales, a quien no le importó utilizar la fuerza y no el diálogo para encontrar una solución.
De nada sirvió que el periodista presentara su carnet y le explicara a los Policías que por disposición de la Dimayor y el club -inexplicable e ilógica por demás- no había sido acreditado. El papel de los uniformados fue restrictivo y soberbio, ante la mirada de un puñado de personas que presenciaron el bochornoso suceso.
Causa curiosidad el rasero utilizado por la Policía en este, cuando al ingreso a la lateral se vio cómo otros elementos que se encontraban prohibidos (canguros, correas con chapas y morrales, entre otros), se veían sin ningún tipo de inconvenientes. En el caso de las correas, un objeto utilizado para agredir al otro.
Es más: En la entrada de cientos de aficionados por los inhumanos accesos hubo empujones y discusiones de todo tipo, ante las graves fallas de la logística. Mientras a unos le ponían 'peros' hasta por sus gafas, para protegerse del sol, otros padecían las largas colas.
"Las medidas restrictivas son cada vez más absurdas. A mí también me sacaron a empujones y con bastante grosería, porque llevaba puestas unas gafas de sol y según la Policía no estaba permitido el ingreso de ese tipo de elementos.
Como si con eso se pudiera agredir de manera contundente a alguien. Que triste que el espectáculo en la cancha y en la tribuna sea empañado por las malas acciones de la Policía que siempre es la que incita a la violencia", indicó Lyda Cruz, hincha del 'Vinotinto'.
Parece que en la ciudad les sigue quedando grande la organización de espectáculos con asistencias masivas, porque en vez de agilizar se encargan de retrasar y obstaculizar.
"Las medidas restrictivas son cada vez más absurdas. A mí también me sacaron a empujones y con bastante grosería, porque llevaba puestas unas gafas de sol y según la Policía no estaba permitido el ingreso de ese tipo de elementos.
Como si con eso se pudiera agredir de manera contundente a alguien. Que triste que el espectáculo en la cancha y en la tribuna sea empañado por las malas acciones de la Policía que siempre es la que incita a la violencia", indicó Lyda Cruz, hincha del 'Vinotinto'.
Parece que en la ciudad les sigue quedando grande la organización de espectáculos con asistencias masivas, porque en vez de agilizar se encargan de retrasar y obstaculizar.
Desde esta redacción el rechazo hacia cualquier tipo de acto que impida el libre ejercicio periodístico es claro. Por ello, conminamos a la Dimayor y el Club Deportes Tolima a que se hagan responsables de cualquier hecho de esta naturaleza que se presente en el futuro.