El apellido Becerra siempre estará ligado al Deportes Tolima. En vida Elson, un escurridizo delantero proveniente de Cartagena, deleitó a los hinchas del 'Vinotinto y Oro' con un talento exhuberante, que enamoró a grandes y chicos y puso a soñar en un sinfín de oportunidades a la divisa Pijao con la gloria.
Y ahora su hijo, Elson David, es el encargado de profesar ese amor por la casaca Pijao. Hace unas semanas recibió por parte de un grupo de hinchas del fanpage Planeta Vinotinto una réplica de la camiseta que vistió su padre, y el domingo pasado, en el triunfo (1-0) ante Equidad, fue invitado a la tribuna sur para rendirle un nuevo y sentido homenaje.
El colectivo del barrio La Ferias, perteneciente a la Revolución Vinotinto Sur, sacó en noviembre anterior un 'trapo' con el rostro del exjugador de la 'tribu' y en esta ocasión llevó a su 'retoño' para que lo exhibiera. Y así fue. El menor de 14 años sostuvo la tela durante todo el partido, en compañía de uno de los sobrinos de este ídolo tolimense y otros miembros de la barra.
La satisfacción no podía ser mayor. Además de este tributo, el joven Elson recibió como premio el triunfo del onceno musical, gracias al tanto convertido a los 15' por el volante antioqueño Matheus Uribe.
El trapo con la cara del 'Chocolatín' seguirá siendo portado en cada juego de local del 'Vinotinto y Oro'. La idea es que se convierta en todo un amuleto para el grupo orientado por Alberto Gamero, de cara a los objetivos propuestos este semestre, tanto en la Liga como en la Copa Águila.
Hay quienes dicen que uno no se hace hincha del Tolima sino que se nace. En todo caso, para Elson David, era imposible evitar su destino. ¡Becerra eterno!