Por: Mario Alejandro Rodríguez
La misma historia, el mismo dolor. Deportes Tolima volvió a perder como visitante en la Liga Águila, esta vez ante Independiente Santa Fe (1-0), en cotejo disputado el martes en el estadio El Campín de Bogotá. Pese a terminar con el 56 por ciento de posesión del esférico, y arrinconar a su rival en los minutos finales, la 'Tribu' fue incapaz de rescatar un punto en la capital.
La misma historia, el mismo dolor. Deportes Tolima volvió a perder como visitante en la Liga Águila, esta vez ante Independiente Santa Fe (1-0), en cotejo disputado el martes en el estadio El Campín de Bogotá. Pese a terminar con el 56 por ciento de posesión del esférico, y arrinconar a su rival en los minutos finales, la 'Tribu' fue incapaz de rescatar un punto en la capital.
El solitario gol del zaguero Yair Arrechea, a los 41' de juego, liquidó la historia entre 'Pijaos' y 'Cardenales', que si bien resultó emotiva, dejó un negro balance para el técnico visitante, Alberto Miguel Gamero.
Arrechea, el hijo de Santander de Quilichao (Cauca) y quien militó por cinco años en el conjunto 'Musical', fue el 'verdugo' de una nueva noche de sinsabores, en el que el desespero fue la constante, y el orden, la utopía.
Tras siete presentaciones por fuera del Murillo Toro, el balance del 'Vinotinto y Oro' es amargo, con apenas tres puntos de los 21 que tuvo en la mesa, y su salida del grupo de los ocho, pese a las 15 unidades que cosechó como local.
El próximo reto del plantel será el cotejo ante Once Caldas, por la jornada 13, en lo que se espera sea el domingo de resurrección. La cita será a partir de las 8 de la noche, en el estadio Murillo Toro, que albergará un partido más antes de su inminente cierre, por las obras de cara a los Juegos Nacionales de noviembre.
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Como ante Atlético Nacional, de nada sirvió la reacción en el segundo tiempo. De nada. Porque otra vez, como ya parece ser costumbre en el presente torneo, la victoria como visitante jamás llegó. Dos periodos radicalmente distintos para los de Ibagué dejaron el mismo balance: cero en caja, y el décimo lugar en el tablero de posiciones.
El primer aviso lo dio el anfitrión, al minuto de juego, cuando le fue invalidado una acción de gol al zaguero Yerry Mina.
Por su parte Avimiled Rivas, a los 10', fue el primero en probar en la media distancia, la fórmula a la que le apostó la visita para inquietar al golero Leandro Castellanos. A él se unió Marco Pérez, sobre los 22', con un potente disparo que pasó cerca del arco norte de El Campín.
Pero más allá de eso, Tolima no generó mayor peligro en campo santafereño. Contrario a la propuesta Roja, que de a poco se arimó al arco custodiado por Joel Silva, aprovechando la mala entrega del esférico en zona medular.
Y a los 41', cuando parecía que el balón se desbordaba por izquierda, un centro de Dairon Mosquera encontró bien ubicado al zaguero central Yair Arrechea, quien ante la infructousa marca del volante Nicolás Palacios, y la mala salida de Silva, la mandó de cabeza al fondo de las piolas, para el 1-0 concluyente.
En la segunda mitad, el ingreso de Didier Delgado en lugar de Obando, por la banda derecha, no generó los resultados esperados en un plantel que jugó un 4-1-4-1, sistema que en la capital no trae muy buenos recuerdos, toda vez que con ese también cayó frente a Santa Fe en septiembre pasado (5-0).
Tampoco el ingreso del volante uruguayo Hernán Figueredo, a los 68', en lugar del defensa Fáiner Torijano, debutante con la escuadra tolimense. El 'Charrúa' estuvo muy parsimonioso en el campo, frente al dinamismo de otros jugadores como Marco Pérez y Andrés Ibargüen.
Y Wilfrido De La Rosa, quien por decisión de Gamero sólo pudo actuar 10 minutos en lugar de Rivas (80'), fue poco lo que pudo hacer en el frente de ataque, junto a un Robin Ramírez perdido, desesperado sin quien le llevara el útil.
Con todo y ello, Tolima -más por deseo que por orden- jugó en campo rival, de irregular rendimiento en los 45' finales (sólo una clara de Daniel Torres sobre los 90'), y de no ser por la falta de definición hubiera logrado, al menos, el anhelado empate, basado en su posesión del balón.
Es claro que el desespero por volver a los ocho le impidió pensar con claridad a un puñado de jugadores que aún no saben qué es festejar en campo ajeno, y que no le rindieron el mejor de los homenajes a Felipe Vásquez, el hincha que dejó su vida horas antes en la carretera, por el amor que sentía a los colores (Ver nota).
Como ante Atlético Nacional, de nada sirvió la reacción en el segundo tiempo. De nada. Porque otra vez, como ya parece ser costumbre en el presente torneo, la victoria como visitante jamás llegó. Dos periodos radicalmente distintos para los de Ibagué dejaron el mismo balance: cero en caja, y el décimo lugar en el tablero de posiciones.
El primer aviso lo dio el anfitrión, al minuto de juego, cuando le fue invalidado una acción de gol al zaguero Yerry Mina.
Por su parte Avimiled Rivas, a los 10', fue el primero en probar en la media distancia, la fórmula a la que le apostó la visita para inquietar al golero Leandro Castellanos. A él se unió Marco Pérez, sobre los 22', con un potente disparo que pasó cerca del arco norte de El Campín.
Pero más allá de eso, Tolima no generó mayor peligro en campo santafereño. Contrario a la propuesta Roja, que de a poco se arimó al arco custodiado por Joel Silva, aprovechando la mala entrega del esférico en zona medular.
Y a los 41', cuando parecía que el balón se desbordaba por izquierda, un centro de Dairon Mosquera encontró bien ubicado al zaguero central Yair Arrechea, quien ante la infructousa marca del volante Nicolás Palacios, y la mala salida de Silva, la mandó de cabeza al fondo de las piolas, para el 1-0 concluyente.
En la segunda mitad, el ingreso de Didier Delgado en lugar de Obando, por la banda derecha, no generó los resultados esperados en un plantel que jugó un 4-1-4-1, sistema que en la capital no trae muy buenos recuerdos, toda vez que con ese también cayó frente a Santa Fe en septiembre pasado (5-0).
Tampoco el ingreso del volante uruguayo Hernán Figueredo, a los 68', en lugar del defensa Fáiner Torijano, debutante con la escuadra tolimense. El 'Charrúa' estuvo muy parsimonioso en el campo, frente al dinamismo de otros jugadores como Marco Pérez y Andrés Ibargüen.
Y Wilfrido De La Rosa, quien por decisión de Gamero sólo pudo actuar 10 minutos en lugar de Rivas (80'), fue poco lo que pudo hacer en el frente de ataque, junto a un Robin Ramírez perdido, desesperado sin quien le llevara el útil.
Con todo y ello, Tolima -más por deseo que por orden- jugó en campo rival, de irregular rendimiento en los 45' finales (sólo una clara de Daniel Torres sobre los 90'), y de no ser por la falta de definición hubiera logrado, al menos, el anhelado empate, basado en su posesión del balón.
Es claro que el desespero por volver a los ocho le impidió pensar con claridad a un puñado de jugadores que aún no saben qué es festejar en campo ajeno, y que no le rindieron el mejor de los homenajes a Felipe Vásquez, el hincha que dejó su vida horas antes en la carretera, por el amor que sentía a los colores (Ver nota).
Otra postal de la fiel afición del #DeportesTolima que se dio cita en #ElCampín, en el duelo ante #SantaFe. ¡Vamos! pic.twitter.com/xgh5TijsRG
— Rincón del Vinotinto (@rinconvinotinto) abril 1, 2015