Por: Mario Alejandro Rodríguez
Cinco victorias al hilo en la Copa Postobón, y el buen arranque en la Liga con un triunfo y un empate, tienen ilusionada a la afición del Deportes Tolima que confía en que este semestre sea especial. Y el gestor de que la esperanza haya renacido en tan sólo dos meses y medio es el técnico samario Alberto Gamero, quien con disciplina le ha dado una cara diferente al plantel que fracasó en la primera mitad del año bajo el mando del ibaguereño Carlos Castro.
En la Copa, torneo que agrupa a los equipos de la A y la B, Tolima quedó este miércoles a un paso de avanzar a los octavos de final del torneo, con 15 puntos de 18 posibles en el Grupo F. El rendimiento es del 83.3 por ciento, y en la reclasificación del certamen, Tolima se ubica cuarto entre 36 clubes, sólo superado por Santa Fe (18 puntos), y Medellín y Chicó, que acumulan 16 unidades cada uno.
Durante los seis partidos que ha disputado la 'Tribu' marcó 14 goles, y sólo recibió cuatro, una diferencia de gol que se compara con la de Junior y Santa Fe, quienes lideran los grupos A y E, respectivamente. Como si fuera poco, el 'Vinotinto y Oro' tiene en el joven Wilfrido De La Rosa a uno de los goleadores del torneo, con cuatro goles en seis encuentros, revalidando así su casta de artillero que quedó en evidencia en el título del Campeonato Sub20.
En la Liga, el conjunto de la 'Tierra Firme' arrancó con triunfo su participación, como no pasaba desde el 'Apertura 2013'. En la primera jornada derrotó a Uniautónoma (2-0), y con la igualdad frente a Envigado del sábado pasado (0-0) ya suma cuatro puntos, que lo tienen -de entrada- en los lugares de privilegio del tablero de posiciones.
Pero no todo está apegado a los números. Es importante decir que Gamero ha utilizado de forma exitosa a jugadores que no estaban bien 'parados' frente a la hinchada y la prensa por sus actos de indisciplina. Nicolás Palacios, quien ya se hizo a un lugar en el plantel titular; Robinson Aponzá, quien ya marcó dos goles por la Copa y Henry Obando, quien de estar relegado al grupo emergente en la era Castro ahora es inicialista en el onceno liguero, son sólo tres de esos casos.
El cambio de mentalidad en el grupo que culminó último del 'Apertura 2014' con 17 unidades de 54 posibles, y no clasificó a la siguiente fase de la Liga en el año que pasó, es más que notable. Y parece que el largo periodo de descanso mientras se llevó a cabo la Copa del Mundo en Brasil fue fundamental para el estratega costeño, quien tuvo tiempo de sobra para conformar su nómina e imprimirle su estilo, caracterizado por la fortaleza en materia táctica.
En cuanto a los refuerzos, los seis nuevos hombres del equipo -el arquero Leonardo Burián, los volantes Juan Alejandro Mahecha y Yulian Mejía y los delanteros Héctor Acuña, Marco Pérez y Andrés Ibargüen- han tenido la oportunidad de demostrar sus condiciones; unos más que otros, pero todos en servicio al colectivo.
Aún es prematuro hacer un balance de lo que han representado las contrataciones en este comienzo, pero lo que sí es claro es que tienen con qué responderle a Gamero en lo que él tanto desea: extender la campaña del Tolima hasta diciembre, con la pelea de los títulos de Copa y Liga.
Con este panorama, la obligación no sólo es del cuerpo técnico y jugadores, sino también de los aficionados, quienes tienen el deber de volver a las tribunas. Desde el punto de vista administrativo, el Club llevó a cabo una ambiciosa campaña de abonos, que si bien no logró los números queridos por el presidente Gabriel Camargo, dejó como precedente el apoyo de más de 2.300 hinchas para toda la temporada.
Es válido soñar, y muy positivo que la comunidad que gira en torno al 'Vinotinto' se una en pro del objetivo que hay pendiente desde hace 11 años. Pero las claves para llegar a la anhelada segunda estrella serán la mesura y la paciencia. Mesura para asimilar como se debe las victorias que hasta hoy logró el grupo, y paciencia para recomponer cuando la adversidad aparezca en el camino.
Eso sí, que no se les olvide: El 2014 es un año diferente. Se cumplen 60 años de existencia del equipo, y qué mejor celebración que la que tenga de protagonista a los ansiados trofeos. En enero los juveniles pusieron su cuota con el de la Sub20, y ahora el turno es para la profesional, que no puede quedarse atrás.