Siempre va a ser especial jugar la Copa Libertadores. Sólo quienes participan en ella saben los innumerables sentimientos que genera y entienden el deber de representar al balompié de todo un país, pese a que nuestros colores no sean los de la gran mayoría.
Cuando se traspasan los límites territoriales, la causa de unos cuantos se convierte en la ilusión de muchos. Y hoy, a partir de las 7:15 de la noche, el Deportes Tolima saldrá a dejar bien en alto el tricolor nacional, en el primero de los dos duelos frente a la Universidad César Vallejo del Perú, un novel que quiere hacer historia en el certamen.
Los 'Pijaos', curtidos en este tipo de instancias, saben que no está permitido el fracaso. Este cotejo marcará la pauta para lo que será el resto de la temporada, en la que la gloria deberá llegar, tras una década sin probar las mieles del título. Para ello han llegado nueve hombres, quienes sumados a los referentes históricos del equipo, tendrán como misión sacar la casta en el evento continental.
De las manos de Antony Silva, el nuevo 'capi' del 'Vinotinto', y el talento de hombres como Yimmi Chará y el nuevo '10', Roberto Merino, la Copa está servida y sólo resta tomar el primer sorbo rumbo a la fase de grupos.
El técnico Carlos Castro, por su parte, hará su debut en el mítico torneo, tras una aceptable participación en la pasada Copa Sudamericana, cuando fue llamado como el 'apagaincendios' del equipo. Quizá la poca experiencia en este tipo de torneos pueda jugarle en contra, cuando requiera tener cabeza fría para tomar decisiones trascendentales. Sin embargo, las filas se han cerrado en torno a su figura y la confianza de hacer un buen papel reposa sobre el nuevo 'Cacique'; afecto que tendrá que retribuir con triunfos de la forma más rápida posible.
Aunque en lo administrativo falta mucho por mejorar en cuanto a la logística y el mercadeo, y aún no se han tomado apuntes de los errores del pasado, en las abruptas determinaciones de su máximo dirigente, estamos llamados a unir fuerzas en torno a un sólo objetivo y a hacer valer el poder de este equipo, tanto en Colombia como en el exterior.
Esta será nuestra sexta experiencia en el torneo. Y así como en el 2011 salimos avante de la primera ronda, ante un gigante como Corinthians, esta vez también podremos hacerlo, si cada una de las partes del engranaje tiene convicción en su labor, en pro de cumplir el objetivo propuesto.
Que esta noche, y las subsiguientes la suerte y el buen fútbol nos acompañe. Porque todos somos Deportes Tolima. ¡Bienvenida la Copa!