Editorial: ¡No hay disculpas!



Editorial: ¡No hay disculpas!





Parece que los hinchas del Deportes Tolima nuevamente le han dado la espalda a su equipo del alma. En los primeros tres partidos del segundo semestre del año, uno por Copa Sudamericana y dos por Liga Postobón la asistencia no ha superado los 4.559 espectadores, cifra que tiene preocupada a la directiva, que poco o nada ha hecho por mejorarla. 

En el primer juego de la temporada, frente al Patriotas el pasado viernes 27 de julio, sólo 1.037 personas compraron su boleta para ver al 'Vinotinto y Oro', lo que dejó un paupérrimo balance económico de apenas 16 millones 500 mil pesos.

La segunda salida, cuatro días después ante el Deportivo Lara de Venezuela, acrecentó la desesperación de la dirigencia,  que se tuvo que conformar con los 2.470 asistentes en las tribunas del Murillo Toro y los 45 millones 675 mil pesos de recaudación, pobre número para un cotejo de la talla de la 'Otra Mitad de la Gloria'. 

Y por si fuera poco, en la tercera confrontación como local, en el clásico regional ante el Atlético Huila el sábado anterior, estuvieron presentes con tiquete en mano 1.052 personas, que reportaron apenas unos 12 millones 550 mil 500 pesos; pese a que se promovieron dos incentivos: 'gancho' para todas las tribunas y disminución del costo de la boleta familiar y la lateral sur.

En este espacio se nos agotaron las razones para explicar la recurrente infidelidad del hincha hacia su divisa y tratar de justificar el porqué de su ausencia en el estadio. Por ello, una vez más, rechazamos la actitud dejada de aquellos que no les importa en absoluto lo que suceda con el conjunto 'Pijao' y prefieren quedarse en casa, cuando su deber es colmar las graderías en cada fecha y alentar durante los 90 minutos, tanto en los momentos de éxito como en las jornadas de adversidad.

Pero así como públicamente le hacemos un fuerte llamado de atención a los que desconocen el verdadero significado del ser incondicional y que se la pasan inventando argumentos para safarse de sus responsabilidades,  también reprochamos falta de gestión y de estrategias para fomentar la masiva asistencia al 'Coloso de la 37'.

Le recordamos a la señora Patricia Hernández, gerente de Mercadeo del equipo tolimense y los encargados de Ticket Shop, la firma encargada de la venta de boletería, que se han quedado cortos en la difusión de los nuevos puntos de venta, lo cual, entre otros factores, le ha dado lugar a la reventa indiscriminada en las afueras del escenario deportivo.

A nuestro juicio, no resulta fácil comprar las boletas para cada cotejo cuando no se ha hecho un efectivo proceso de socialización para educar al hincha en un nuevo sistema, diferente al que se estaba acostumbrado, en el que las incomodidades eran frecuentes. Y que importante sería que ambas partes, tanto Ticket Shop como el Deportes Tolima que tomen rápida conciencia sobre el particular, porque de no hacerlo seguiremos viendo las tribunas vacías. 

Lo anterior no debe tomarse como una justificación ante las bajas asistencias, sino más bien la carencia de un plan de contingencia para atacar el ausentismo, originado por otras excusas, como la presunta falta de motivación ante un onceno que acumula frustraciones seguidas, el no tener recursos económicos para cumplir en cada fecha (que puede ser cierto) o poca masificación de afición, entre otros.

En el tema de la motivación: ¿Acaso no es suficiente impulso emocional ir a ver al equipo que más quiere y al que ha acompañado toda su vida?...

¡Ojo! Que ni la dirigencia del Club, ni la empresa de boletería crean que los medios de comunicación harán el trabajo de divulgación por ellos y gratis, cuando es su misión impulsar este proceso.  Todo tiene un límite y el abundado 'freepress' (la conversión del producto o servicio de una empresa en noticia publicable en los medios*)  ya es suficiente regalo de la prensa para el 'Vinotinto'.

Como es lógico, quien quiere promocionar un producto y darle amplia difusión deberá pagar un costo por ello, porque en síntesis eso es el Tolima: Un producto, que como otros, deja ganancias pero a la vez pérdidas, pero que además representa a todo un pueblo en la escena nacional y juega con los elementos simbólicos de la región, como la raza, bandera, idiosincracia y demás.

En conclusión: si bien los hinchas tienen un altísimo porcentaje de culpabilidad por las malas taquillas que se han hecho en este segundo semestre, debido a las múltiples y trilladas razones que esgrimen para no ir al estadio, el Deportes Tolima no es ajeno a tal situación, por la falta de inventiva, sagacidad y de perseverancia para cautivar seguidores.

*Aparte tomado de Yahoo







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