En toda una tortura se ha convertido el ingreso de los aficionados a las tribunas populares del Manuel Murillo Toro. El pésimo esquema de logística organizado por el Club Deportes Tolima y la Policía Nacional en más de una ocasión ha generado serios desórdenes en las puertas de acceso, donde se ha vuelto común ver en los últimos juegos empujones y peleas con la Fuerza Pública.
A pesar del buen operativo realizado en los alrededores del escenario deportivo y dentro de él para el juego por Copa Libertadores frente a Corinthians, volvimos a presenciar escenas lamentables que van en contra del espectáculo deportivo y que alejan a los amantes del fútbol de las canchas.
Tal cual aconteció en la Final de la Liga Postobón 2 2010, cuando los anillos de seguridad, la tardía apertura de la tribuna sur y algunos vejámenes de la Policía impidieron a los seguidores ingresar a tiempo al ‘Coloso de la 37’; la tarde del sábado anterior se convirtió en caótica para los espectadores que (algunos desde dos horas antes de iniciar el partido) fueron a alentar a su equipo del alma.
Los hombres del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) mostraron nuevamente el abuso de fuerza y su falta de ‘tacto’ para con la población civil. En constantes oportunidades enfrentaron cara a cara a diversos seguidores, varios de los cuales recibieron agresiones por no ‘acatar’ según ellos las peticiones que les hicieron.
Si bien en la ‘Ciudad Musical’ ha sido costumbre llegar sobre los últimos instantes a las tribunas del Murillo y que un porcentaje de la población carece de verdadera “Cultura Ciudadana” en este tipo de eventos, también es cierto que la logística no ayuda en nada a facilitar la entrada de los mismos a sus respectivos lugares.
En el encuentro frente al cuadro santafereño no fueron habilitadas todas las puertas de la Lateral, a sabiendas que el número de personas que ingresarían a esta tribuna sería alto. Esta situación aumentó el desespero de los hinchas, quienes al presentir que se van a perder el cotejo por el que pagaron reaccionan vehementemente ante los uniformados; entendible en cierto modo, pero no digno de compartir.
En el debut en la Liga, fueron muchos los seres que entraron al ‘Coloso’ cuando el juego ya estaba en curso, incluso con más de media hora de desarrollo.
Para sorpresa nuestra, el gerente del Deportes Tolima, Ricardo Salazar, tuvo que ir personalmente -a falta de cinco minutos para el pitazo inicial- a tratar de solucionar los inconvenientes presentados. Decimos para sorpresa nuestra, porque se supone que debe haber un cuerpo encargado de las novedades que se presenten a última hora y no el delegado de una escuadra que está a punto de saltar al terreno de juego.
Estas realidades son muestra inequívoca de la completa improvisación que se tiene para algunos -cabe la salvedad no todos- ámbitos administrativos del elenco de la ‘Tierra Firme’.
Para la afición se ha convertido un trauma ir a los choques importantes del ‘Vinotinto y Oro’. Pero no sólo ellos se ven afectados por esta mediocre organización; los medios de comunicación locales, nacionales e internacionales también han tenido graves dificultades en el ejercicio de su trabajo, con las decisiones déspotas del presidente y máximo dirigente del Club, Gabriel Camargo Salamanca.
El controvertido dirigente deportivo en repetidas veces ha desconocido el derecho y el deber que tienen las firmas periodísticas de informar y cubrir la actualidad del equipo de Ibagué. Recordemos el lamentable suceso ocurrido con las agencias internacionales AFP y EFE, medios a los cuales el exsenador les restringió el ingreso en el partido por Copa Sudamericana 2010 entre Deportes Tolima y el Banfield de Argentina.
Camargo, ha reflejado ignorancia total en temáticas tan relevantes por estos días como el gran poder que tienen los medios digitales en la construcción de contenidos informativos; caso puntual en cuántos y cuáles son los sitios web que están al tanto del Tolima
Este espacio, El Rincón del Vinotinto, ha intentado en una oportunidad mediante carta firmada y e innumerables momentos en diálogo con la Jefe de Prensa, Ximena Peña, de obtener vía libre a los juegos del conjunto ‘Musical’, pero la respuesta ha sido negativa; quizás sin atribuirle sentido de culpa o negligencia a esta persona, quien al fin de cuentas es un funcionario más que cumple los mandatos de su jefe.
Al menos, si no se nos permite la entrada como portal de información, exigimos que como hinchas sí podamos tener un normal ingreso a los cotejos; es lo mínimo a lo que tenemos derecho como consumidores de un producto llamado Fútbol Profesional Colombiano, para el cual pagamos una boleta y queremos disfrutar de principio a fin.
Esperamos que hechos bochornosos como los vividos en este juego no se vuelvan a repetir y que la Policía Nacional como el Club Deportes Tolima hagan conjuntamente -como debe ser- un mayor esfuerzo para ofrecerle un evento digno a los aficionados.
A pesar del buen operativo realizado en los alrededores del escenario deportivo y dentro de él para el juego por Copa Libertadores frente a Corinthians, volvimos a presenciar escenas lamentables que van en contra del espectáculo deportivo y que alejan a los amantes del fútbol de las canchas.
Tal cual aconteció en la Final de la Liga Postobón 2 2010, cuando los anillos de seguridad, la tardía apertura de la tribuna sur y algunos vejámenes de la Policía impidieron a los seguidores ingresar a tiempo al ‘Coloso de la 37’; la tarde del sábado anterior se convirtió en caótica para los espectadores que (algunos desde dos horas antes de iniciar el partido) fueron a alentar a su equipo del alma.
Los hombres del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) mostraron nuevamente el abuso de fuerza y su falta de ‘tacto’ para con la población civil. En constantes oportunidades enfrentaron cara a cara a diversos seguidores, varios de los cuales recibieron agresiones por no ‘acatar’ según ellos las peticiones que les hicieron.
Si bien en la ‘Ciudad Musical’ ha sido costumbre llegar sobre los últimos instantes a las tribunas del Murillo y que un porcentaje de la población carece de verdadera “Cultura Ciudadana” en este tipo de eventos, también es cierto que la logística no ayuda en nada a facilitar la entrada de los mismos a sus respectivos lugares.
En el encuentro frente al cuadro santafereño no fueron habilitadas todas las puertas de la Lateral, a sabiendas que el número de personas que ingresarían a esta tribuna sería alto. Esta situación aumentó el desespero de los hinchas, quienes al presentir que se van a perder el cotejo por el que pagaron reaccionan vehementemente ante los uniformados; entendible en cierto modo, pero no digno de compartir.
En el debut en la Liga, fueron muchos los seres que entraron al ‘Coloso’ cuando el juego ya estaba en curso, incluso con más de media hora de desarrollo.
Para sorpresa nuestra, el gerente del Deportes Tolima, Ricardo Salazar, tuvo que ir personalmente -a falta de cinco minutos para el pitazo inicial- a tratar de solucionar los inconvenientes presentados. Decimos para sorpresa nuestra, porque se supone que debe haber un cuerpo encargado de las novedades que se presenten a última hora y no el delegado de una escuadra que está a punto de saltar al terreno de juego.
Estas realidades son muestra inequívoca de la completa improvisación que se tiene para algunos -cabe la salvedad no todos- ámbitos administrativos del elenco de la ‘Tierra Firme’.
Para la afición se ha convertido un trauma ir a los choques importantes del ‘Vinotinto y Oro’. Pero no sólo ellos se ven afectados por esta mediocre organización; los medios de comunicación locales, nacionales e internacionales también han tenido graves dificultades en el ejercicio de su trabajo, con las decisiones déspotas del presidente y máximo dirigente del Club, Gabriel Camargo Salamanca.
El controvertido dirigente deportivo en repetidas veces ha desconocido el derecho y el deber que tienen las firmas periodísticas de informar y cubrir la actualidad del equipo de Ibagué. Recordemos el lamentable suceso ocurrido con las agencias internacionales AFP y EFE, medios a los cuales el exsenador les restringió el ingreso en el partido por Copa Sudamericana 2010 entre Deportes Tolima y el Banfield de Argentina.
Camargo, ha reflejado ignorancia total en temáticas tan relevantes por estos días como el gran poder que tienen los medios digitales en la construcción de contenidos informativos; caso puntual en cuántos y cuáles son los sitios web que están al tanto del Tolima
Este espacio, El Rincón del Vinotinto, ha intentado en una oportunidad mediante carta firmada y e innumerables momentos en diálogo con la Jefe de Prensa, Ximena Peña, de obtener vía libre a los juegos del conjunto ‘Musical’, pero la respuesta ha sido negativa; quizás sin atribuirle sentido de culpa o negligencia a esta persona, quien al fin de cuentas es un funcionario más que cumple los mandatos de su jefe.
Al menos, si no se nos permite la entrada como portal de información, exigimos que como hinchas sí podamos tener un normal ingreso a los cotejos; es lo mínimo a lo que tenemos derecho como consumidores de un producto llamado Fútbol Profesional Colombiano, para el cual pagamos una boleta y queremos disfrutar de principio a fin.
Esperamos que hechos bochornosos como los vividos en este juego no se vuelvan a repetir y que la Policía Nacional como el Club Deportes Tolima hagan conjuntamente -como debe ser- un mayor esfuerzo para ofrecerle un evento digno a los aficionados.