Por: Mario Alejandro Rodríguez
La reciente desvinculación de la empresa tolimense de confección deportiva Sheffy por decisión de la dirigencia del Deportes Tolima, ha causado gran revuelo en los aficionados, muchos de los cuales no entienden las razones por la cuales se tomó esta sorpresiva determinación.
No es la primera vez que Sheffy es dejada a un lado por la institución 'musical'. En el pasado, más exactamente 2005 y 2007, las directivas optaron por cambiar de indumentaria ante la calidad ofrecida por la marca local.
Runic, en la primera ocasión y Keuka, en la segunda, decepcionaron con sus productos, por lo cual en las dos oportunidades la empresa de Miguel Fernando Castillo retornó para vestir al club sin ningún problema.
Runic, en la primera ocasión y Keuka, en la segunda, decepcionaron con sus productos, por lo cual en las dos oportunidades la empresa de Miguel Fernando Castillo retornó para vestir al club sin ningún problema.
Según lo que se ha conocido en los distintos medios de comunicación, los motivos argumentados para la ruptura del convenio -que entre otras fue verbal, no escrito- fueron: La calidad irregular de las camisetas y la insuficiente dotación que se le era entregada al grupo de jugadores, dadas a conocer por el presidente del club, Gabriel Camargo.
Es indudable que la historia de Sheffy está ligada al momento más especial vivido por el cuadro Pijao: el título de 2003. Fue precisamente en ese exitoso año cuando la casaca con rayas verticales Vinotinto y Oro enamoró a la hinchada y fomentó el sentido de identidad que tanto le hacía falta a la corporación deportiva.
De Mitre, se sabe que es una firma inglesa que llegará a vestir no solo al Deportes Tolima sino también lo hará con el Deportivo Cali. En cuanto a la calidad de sus prendas no se conoce mucho y sólo se tiene como referencia que es la marca encargada de dotar al actual campeón argentino, Banfield.
Hasta el momento han llegado los uniformes de entrenamiento al club ibaguereño. Se está a la espera de la primera camiseta, debido a que no se define el orden de los patrocinadores, ni en definitiva cuantos serán para este primer semestre del 2010.
Entre gustos no hay disgustos como reza el adagio popular. Cada cual tiene su propia visión al respecto y por ello se defiende o ataca la decisión tomada por Camargo y sus asesores. Lo que sí es cierto es que ellos, los dirigentes, cuentan con total libertad para escoger a su juicio la mejor opción, la más conveniente para el rendimiento de los jugadores y también para el bolsillo del equipo.