Actualizado Agosto 30/09 8:55 P.M.
Por: Mario Alejandro Rodríguez ([email protected])
En un juego para olvidar Deportes Tolima sucumbió en condición de local por marcador de tres goles a cero frente al Deportivo Cali, en el marco de la octava fecha de la Copa Mustang 2 2009. Los goles del equipo verdiblanco fueron obra del defensa Pablo Escobar (min 24 P.T.), el volante Luis Omar Valencia (min 31 S.T.) y del delantero Diego Álvarez (min 41 S.T.). La actuación del central Henry Barón de Bogotá no estuvo acorde a la altura del compromiso.
Ante la presencia de cuatro mil personas el “vinotinto y oro” vio como desde el primer tiempo el partido se le salía de las manos. Pese a que el local puso la primera opción en el juego, el visitante supo acoplarse rápidamente en la cancha y descifrar el juego planteado por su rival.
Con el manejo del balón del peruano Juan Carlos Mariño y el trabajo recuperador de la pareja Herrón – Pérez, Cali ganó presencia en los dos últimos cuartos del campo y buscó llegar al arco de Bréiner Castillo. Tolima por su parte no fue capaz de aprovechar el desborde por el costado de Vallejo, quien era desequilibrante en su zona pero le faltó precisión en los pases al centro del área.
En una jugada que aparentemente no tenía ningún riesgo de compromiso alguno de la valla de “Brecas” llegó el primer gol del cotejo. Al minuto 24, un soberbio impacto de tiro libre del defensa pablo Escobar desde 40 metros descontroló al portero “pijao”, y lo dejó sin alguna alternativa de evitar la apertura caleña de la pizarra.
De ahí en adelante la falta de futbol ofensivo y de claridad en la definición de las pocas opciones de gol se hizo más que evidente y desencadenó en el desespero del cuadro anfitrión que no pudo reponerse del duro golpe.
La expulsión de Davinson Monsalve a los 41 minutos terminó de descuadernar el 4-4-2 implantado por Hernán Torres en el césped, que pasó a ser un 3-4-2 por la necesidad imperiosa de lograr la paridad.
En la segunda parte, la actitud del equipo no fue la mejor. La displicencia en el encuentro apareció en elementos como Cristian Marrugo (que no aportó sus capacidades técnicas a favor del D.T) y Darío Bustos, que no pudo aprovechar la lateral izquierda.
Los orientados por José “Cheché” Hernández fueron prácticos y le apostaron al contragolpe, el cual les dio resultados positivos. Por otra parte los malos cambios fueron la característica en el banco “musical”; muestra de ello fue la variante de Jesús Valencia por Milton Rodríguez, que en vez de aportar seguridad en el fondo le quitó protagonismo al frente de ataque.
Al minuto 31 de la complementaria un tiro libre magistral de Luis Omar Valencia se encargó de sepultar las esperanzas de victoria del equipo de casa. El habilidoso volante con su buena pegada venció a Castillo con facilidad, para el delirio de los hinchas “verdiblancos” que se acercaron al Coloso de la 37.
Y para completar la tarde “negra” del “vinotinto”, a cuatro minutos del final el delantero antioqueño Diego Álvarez, que había ingresado promediando la segunda parte, fue el que cerró con el tercer tanto el compromiso en la capital tolimense. Con esta derrota Tolima quedó en la posición 15 con 8 puntos de 24 posibles, a la espera de su próximo adversario el Atlético Huila en una versión más del clásico regional dentro de 15 días.
EN EL TINTERO…
• El regular arbitraje del central bogotano Henry Barón. Se notó “cargado” a favor del Deportivo Cali en lo disciplinario, donde dejó muchas dudas. la afición se fue molesta con el silbato al considerar injusta la expulsión del zaguero Davinson Monsalve.
• Los serios desordenes al termino del juego en la tribuna sur del Manuel Murillo Toro, entre la barra Revolución Vinotinto Sur y la Policía Nacional. Es una VERGÜENZA que personas de vida PÚBLICA, que hacen parte visible de una agrupación de hinchas sean los que provoquen reacciones hostiles de los aficionados y de la fuerza policial, aprovechando su condición de “lideres”. Estas conductas IRRESPONSABLES van en contra del espectáculo y de la tranquilidad de los asistentes a fútbol, y hacen que los que van tranquilamente a disfrutar de la jornada futbolera no vuelvan. Por otro lado también es lamentable que la Policía Nacional tenga que recurrir a la fuerza para reprimir y para controlar la actitud de los hinchas.
• Los serios desordenes al termino del juego en la tribuna sur del Manuel Murillo Toro, entre la barra Revolución Vinotinto Sur y la Policía Nacional. Es una VERGÜENZA que personas de vida PÚBLICA, que hacen parte visible de una agrupación de hinchas sean los que provoquen reacciones hostiles de los aficionados y de la fuerza policial, aprovechando su condición de “lideres”. Estas conductas IRRESPONSABLES van en contra del espectáculo y de la tranquilidad de los asistentes a fútbol, y hacen que los que van tranquilamente a disfrutar de la jornada futbolera no vuelvan. Por otro lado también es lamentable que la Policía Nacional tenga que recurrir a la fuerza para reprimir y para controlar la actitud de los hinchas.
• La violación de la norma del ingreso de emblemas del equipo visitante al estadio Murillo Toro. Los hinchas del Deportivo Cali ingresaron tranquilamente una bandera con el escudo del equipo caleño y el nombre de la ciudad de Ibagué. Al final la bandera, luego de que la policía prohibió su uso, volvió a ser mostrada sin que nadie de la policía hiciera nada por impedirlo.
FOTO CORTESÍA: www.futbolred.com