POR: MARIO ALEJANDRO RODRÍGUEZ ([email protected])
Con tanto del brasileño Fernando Oliveira, al minuto 39 de la inicial Equidad Seguros acabó con las ilusiones de clasificación del Deportes Tolima en el marco de la última fecha de los cuadrangulares semifinales. El delantero del equipo “asegurador”, ex “vinotinto y oro”, fue el verdugo del equipo de Ibagué, escuadra que no desplegó el fútbol efectivo que lo caracterizó como el mejor en la fase regular del certamen.
Con toda la ventaja para ser el finalista del grupo A, debido a su primer lugar de la zona con ocho puntos el equipo ibaguereño saltó al gramado del estadio Metropolitano de Techo a buscar una victoria que le diera el tiquete a la gran final. Sin embargo, el que impuso condiciones desde las primeras de cambio fue el local, con buena recuperación en la zona medular, y las incursiones por izquierda del volante Diego Cochas.
Por su parte, las falencias en la recuperación del balón eran evidentes, y la esférica desaparecía rápidamente de los hombres del elenco “pijao”. No obstante, el gran sacrificio en generación de juego del volente cartagenero Cristian Camilo Marrugo permitió que Wilder Medina intentara aproximarse a predios defendidos por Álvaro Solis, pero sin éxito alguno.
Cuando parecía que el visitante se había acoplado al terreno de juego y controlaba bien el juego, un centro al minuto 39 desde el sector derecho encontró la cabeza del ingresado Fernando Oliveira, para que en solitario decretara la única anotación de la tarde capitalina.
De ahí en adelante las condiciones del cotejo cambiaron, y la obligación del equipo tolimense por conseguir la paridad era evidente. En el minuto final de la primera etapa, Medina tuvo la opción de poner cifras iguales en el marcador, pero el impacto de “globo” pasó ligeramente desviado del arco sur del escenario deportivo.
Para la segunda parte las cosas no cambiaron en absoluto. Equidad manejó a su antojo los ritmos del juego, e indujo a la desesperación al representativo de la ciudad musical. El cambio de Jorge Perlaza por Gustavo Bolívar no surtió efecto, como tampoco la variante de César Rivas por Wilder Medina.
De nuevo se notó la ausencia del argentino Rodrigo Marangoni como socio de Marrugo. También la falta de salida por la lateral derecha y el desgaste de muchos de los elementos “vinotinto”. Las intenciones de llegar a campo adversario fueron escasas, y sólo Gerardo Vallejo por la banda derecha hizo el esfuerzo por encontrar recepción en el centro del área chica.
Sumado a esto, estaba el partido en la ciudad de Tunja entre Boyacá Chicó y Once Caldas. El encuentro en la capital boyacense comenzó con victoria del Once y terminó de la misma manera, 3 - 2, no sin antes la paridad y ventaja parcial del Chicó.
En un momento Tolima estuvo clasificado a la final, pero luego ese privilegio se rotó entre el “verde” de Bogotá y el club manizalita. Al final, el cupo fue para el “Blanco”, que tenia la segunda posibilidad en el tablero de posiciones.
Otra vez Equidad se convierte en la “bestia negra” de los dirigidos por Hernán Torres Oliveros. La última derrota en la capital de la república había significado la eliminación del Tolima de la gran final del Copa Mustang 2 2008, el 10 de diciembre cuando cayó por marcador de 3 goles a 1 en la quinta fecha de los cuadrangulares de ese año.